Juan Sebastián Quintero: “Un milagro me salvó la vida en un atentado con arma de fuego”

“Caleño, nací aquí. Me crié en Palmira, pero hice las menores en Deportivo Cali y estudié en Cali”, así se define Juan Sebastián Quintero, el central del equipo que dirige Alfredo Arias habló con AS Colombia y contó lo que ha sido su carrera en el fútbol desde su paso por España, Brasil y Colombia.

Toda la familia en el fútbol: “Mi papá ahora en el tema directivo, mi madre fanática del fútbol, no he visto a nadie como ella. Mis abuelos, mi hermano juega, está en Deportivo Pasto. Corre fútbol por mi familia”.

Su posición fue impuesta o por gusto: “Siempre, toda mi vida (defensa central). Era lo que quería, mi madre me cuenta que desde que tenía 4 o 5 años me paré ahí y ella se asombró porque era fanática de Andrés Escobar, la muerte de él le dio muy duro y yo pararme ahí fue increíble. Fue algo muy especial”.

Un defensa debe tener carácter: “Yo también la voy con esa escuela y concepto. Uno ahí atrás tiene que entrar como habla uno a nivel futbolístico a comerse los rivales, desde el saludo, el aspecto, todo va contando y eso te ayuda a la hora de entrar al terreno de juego”.

Inicios en el fútbol: “Hago todas las menores en Deportivo Cali, hago procesos de selección Valle y Selección Colombia con sub-15, sub-20 e incluso tuve procesos con el profe Pékerman. En Deportivo Cali hice todo, debuté finalizando 2012 con el profe Leonel, me puso a debutar con 17 años en un partido bravo en Pasto y desde ahí comencé con el equipo profesional”.

Su primer título con el Cali: “En 2015 fui campeón con Pecoso, pero siento que no lo viví mucho porque estaba con la Selección Colombia Sub-20 y concentrábamos demasiado, estuvimos mucho tiempo fuera en el Mundial que fue en Nueva Zelanda. Nos vamos con Borré, Orejuela, Angulo y entonces nos perdimos los partidos finales de ese campeonato, pero claro que ese semestre lo jugamos y fuimos campeones”.

Del Piscis al Pecoso, los técnicos

El Piscis Restrepo, un técnico formador: “Para mí, sí. Fue un hombre al que le aprendí demasiado, me enseñó muchísimo a nivel personal y futbolístico. Tiene un manejo de grupo increíble y creo que le aportó muchísimo al fútbol colombiano. Sacó muchos talentos y lo quiero mucho, le mando un saludo”.

Su historia con el Pecoso: “Con el Pecoso no tuve una muy buena relación, obviamente es un gran ídolo del club, quedamos campeones, pero sentí muchas veces que no sé si por su edad se pasaba ese límite de ser jodido a faltarle el respeto a la persona, al ser humano. La verdad tuve muchas diferencias con él, pero hoy en día lo saludo y le doy un abrazo. Es una leyenda y un ícono de nuestro club”.

Solución de conflictos con un DT: “Es jodido, porque le estás diciendo. Hay técnicos que logran entender. Siempre tiene que haber respeto de ambos lados, si te faltaron al respeto no actuar igual, pero si tomar medidas con respeto. Si la otra persona, que es el técnico, no lo acepta porque pasa muchas veces, por tema de ego, edad, de muchas cosas que hay en el fútbol y toman represalias ahí es jodido. Son temas bien complicados, pero desde que seas respetuoso la decisión de la otra persona no está en tus manos”.

Un atentado que le cambió la vida

El atentado que sufrió y el golpe a la inmadurez: “Fue muy jodido para mí y mi familia, fue en diciembre de 2018 y terminaba contrato con el Cali. Grupalmente no nos fue bien, pero personalmente si y eso me llevó a Brasil. También tuve comportamientos fuera de la cancha que no fueron los mejores y eso irritó a parte de la hinchada y ahí me faltó mucho compromiso, estaba inmaduro y me equivoqué en eso. Llega el atentado a final de año y eso fue muy duro, para mí y mi familia. Me voy un tiempo del país a visitar un amigo afuera y cuando volví llegó la posibilidad de irme a Brasil y tomé la decisión de irme”.

¿Después de un atentado se valora más la vida? “Me hacen el atentado, las balas quedan en el carro porque no era blindado. El policía cuando le hacían el peritaje me decía ‘como no te pasó nada’, la bala atravesó la cartera del carro y en lugar de seguir derecho se fue para abajo y al otro día me encontré una señora en el condominio y se le aguaron los ojos y ella me dice ‘cómo está tu familia’, una señora de edad, le digo que bien y me dice ‘tengo un testimonio increíble contigo’. Me mencionó que si me acordaba del día del atentado y me dice ‘Dios me había dicho en un sueño que tenía yo que hacer porque iban a matar a alguien. Días antes Dios me dijo que le dijera al portero que dejara la puerta abierta y que el portero se encerrara en el baño’. Cuando me dice eso, yo retrocedo la película y me acuerdo que cuando acelero el carro para entrar al condominio la puerta estaba abierta, no tuve que pitar. Son cosas de Dios que cuando uno menos cree, Dios está con nosotros en todo momento. Hoy que ya le entregué mi vida a Dios comprendo eso, me puse a llorar y dije ‘increíble Dios lo que me has cubierto y protegido incluso veces que no lo merecí’.

Quintero y su experiencia en el exterior

Su paso por España: “Fue una buena oportunidad, económicamente era muy buena, era muy joven. Venía del Sudamericano y fue una persona que justo me había visto en ese torneo y llegó la posibilidad. Llegó al Cali la oferta y se dio, el préstamo era bueno para el club y para mí en cuanto a salario. Le hablé al club que me dieran esa posibilidad y que era un sueño de jugar en Europa y siempre me facilitó eso, a pesar de que era una promesa en ese momento. Fue bravo, me costó la cultura de ellos, aquí somos más calurosos, en el camerino, en el día a día, salimos del entreno y compartimos. Ellos allá eran muy fríos, en varias cosas me dio duro. Futbolísticamente me adapté muy bien, jugué 8 o 10 partidos en el Sporting de Gijón me sentí muy bien. Es más rápido, técnico, al fútbol me adapté bien, pero lo que me dio duro fue lo extra campo”.

Brasil, su segunda casa: “Amo Brasil, es mi segunda casa, mi hijo Thiago el mayor es brasileño. Mi esposa se adaptó muy bien con el idioma. Tengo muy buenos recuerdos y dejé muy buenos amigos allá en Brasil. Si, Fortaleza me marcó muchísimo, lo tengo tatuado. Es increíble, antes de regresar a Colombia con el equipo que estaba en Brasil jugando (Vila Nova) nos tocó un partido allá contra el rival de Fortaleza que es Ceará y llegamos al aeropuerto a la medianoche o una de la madrugada y había por lo menos 3 mil o 4 mil personas, solo para verme, saludarme o tomarse fotos, una locura. Fortaleza vive en mi corazón, Brasil también, estuve en Vasco, Juventude y ahora en Vila Nova, gracias a Dios me fue muy bien”.

¿Le cuesta al colombiano en el fútbol brasileño? “No tendría respuesta porque culturalmente esos manes son una copia de nosotros en todo, la música, la comida, la forma de ser. Al extranjero lo hacen sentir bien, el clima es casi igual. No tendría explicación porque a mí me fue muy bien. Cuando estuve allá estaba Cantillo en Corinthians, para mí es un jugadorazo y yo decía por qué no ha podido arrancar y como él, muchos casos. No entiendo, porque es una cultura muy parecida”.

Pereira y su top 3 mundial actual

El top 3 en el mundo: “Lamine Yamal, está en el top 3. Lo que hizo el otro día con 17 años es increíble. Mbappé no está pasando por su mejor momento, ni Vinícius, ni el Real Madrid, pero son jugadores individualmente muy diferentes”.

Pereira y la Libertadores: “Fue una gran experiencia y gran año, no la creímos que era en el terreno de juego, afuera éramos trabajadores, un grupo humilde y unido, fue una gran experiencia. Eso tiene que pasar con los equipos colombianos, se la tienen que creer, tienen que marcar diferencia en esos torneos, hay grandes equipos. Está Nacional, América, Once Caldas, Bucaramanga y tienen que creérsela y saber que se puede llegar a grande en esos campeonatos”.

Ganarle a Boca: “Hermoso, para mí fue muy especial, porque soy hincha de Boca a muerte, por ahí tengo la camiseta en un cuadro que cambié ese día en la Bombonera. Crecí viendo el Boca de Tévez, Schiavi, Riquelme, Palermo, Palacios, ese Boca que le ganó al Real Madrid. Entonces ganarle fue algo muy especial”.

Cómo se planificó la victoria ante Boca: “Él (Restrepo) siempre tenía una idea de juego muy clara, pero tenía detalles del otro equipo que los desmenuzaba muy bien, falencias del otro equipo y ese es el plus del profe, por eso le ha ido tan bien por donde pasa. Me acuerdo que ese día era presionarlos arriba y esa gente nunca logró meterse en el partido. En la Bombonera nos empatan en los minutos finales porque la idea era la misma, salir rápido con la defensa. Ataques verticales y logramos plasmarlo muy bien aquí y en la Bombonera”.

Su salida del Pereira: “Estaba feliz ahí, había recibido una propuesta de Independiente y ahí es donde Pereira decide comprarme y firmarme por 3 años, pero al final del torneo que no terminamos bien pasan temas personales que no me gustaron y a ellos tampoco y decido terminar el contrato y dejar las cosas así. Fue un año muy especial, pero a todos los de Pereira los llevo en mi corazón”.

Regreso a Deportivo Cali y Alfredo Arias

La vuelta al Cali: “Me siento en mis mejores años de carrera, maduro en muchos temas personales, en el tema humano, en el futbolístico y entregarle eso al club que amo eso no tiene precio. Tener la oportunidad de estar aquí me lo plantee y hoy en día lo entiendo así”.

Alfredo Arias: “Le tengo un cariño muy grande en este poco tiempo que nos hemos conocido, es un gran ser humano. Un gran trabajador, un manejo de grupo muy bueno y una idea de juego muy clara que estoy seguro que va con el ADN del club y fue la persona indicada en llegar. Ojalá pueda durar más tiempo con nosotros aquí”.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí